martes, 29 de marzo de 2011

 BELLEZA EN LA MATERNIDAD


Ahora recuerdo...

  Escasos días para poder ver la cara de mi hijo Tirso, me asaltaban un sin fín de dudas a causa de la maternidad y todo lo que ello repercute.
Imagino que las que ya sois madres, habréis pasado por esto y no habrá mejor manera de despejar estos miedos, que dejando que los días transcurran con tranquilidad pensando que lo mejor está aún por venir.

Seguramente que alguna vez en tú vida has pensado cómo sería tu embarazo y como afrontarías los cambios que tu cuerpo sufre en estos nueve meses.  todavía recuerdo mi noveno mes de gestación; te podría decir  que aunque los cambios físicos son radicales, creo que puedes sacarle mucho partido a “Las nuevas curvas” y sentirte igualmente sexy.


 Te recomiendo que empieces a cuidarte desde el primer mes y así poco a poco los días irán pasando y tanto tu estado físico como el mental estarán en plena forma y con mucho ánimo.

 El problema más temido por todas las mujeres en el embarazo son las antiestéticas estrías. No te descuides en este tema y a partir del tercer mes empieza utilizando productos específicos para ello, al menos tres veces por semana o aplicando aceite de almendras dulces, realizando un masaje en las caderas, abdomen  y glúteos.

 Si desde un principio tienes mala circulación y las piernas cargadas, lo mejor es que realices dos veces por semana un drenaje linfático para piernas y muslos; se reducirán de inmediato la hinchazón y la sensación de pesadez. Otra de las cosas  que no debes descuidar, es el pecho, que creo que es el que sufre el cambio más espectacular desde el primer día, y ten en cuenta que es éste el que después de  dar a luz, seguirá sufriendo estos cambios. Utiliza un sujetador adaptado a tú nueva talla, en el mercado encontrarás cremas qué mantienen la piel de esta zona suave, elástica y reafirmada.




 La piel del rostro, durante el embarazo, sobre todo si está expuesta al sol, tiende a mancharse  alrededor de la boca, sobre los pómulos y en la frente. Para ello no salgas a la calle sin un mínimo de protección solar y utiliza una crema con vitamina C. Aunque te veas con unos kilos de más, no renuncies a sentirte guapa y no descuides el maquillaje. 


Resalta la parte que más te guste, los ojos iluminados con sombras claras y tonos que te iluminen, aprovecha que llega el buen tiempo y aplícate unos polvos de sol, muy favorecedores y  los labios sugerentes y brillantes en tonos tierra y melocotón.

Tampoco debes olvidarte de tus pies y manos, ya que con el calor y el peso tienden a hincharse, lleva las uñas siempre arregladas, con laca transparente y brillante, en tonos claros y naturales o en rojos muy intensos. Aprovecha antes de dormir para hidratarlos con un poco de crema.

De todas formas; saber, que todos estos cambios son pasajeros y que después con un poco de constancia se irán pasando para volver a verte en tu estado original, es un alivio. Deja que los demás te cuiden y disfruta de tiempos de relax con tus familiares y amigos que  te darán buenos consejos y ayudarán a afrontar los nuevos retos con mucha ilusión.
 Además no tengas duda, que cuando veas los ojos y la sonrisa de tú hijo como yo vi los de Tirso lo peor habrá pasado  y una nueva vida se abrirá ente ti.


MI EMBARAZO. Eva Escolano


 ¡ MUCHAS FELICIDADES MADRES ¡

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